Somalia: una nueva escalada de violencia podría agravar la hambruna

Al cumplirse hoy tres meses de la declaración de hambruna que la ONU decretó en en varias zonas de Somalia el pasado 20 de julio, Oxfam ha alertado que la nueva escalada de ataques y la inseguridad reinante a lo largo de la frontera entre Kenia y Somalia amenaza con aumentar aún más el sufrimiento de la población civil ya devastada por la sequía y el conflicto.

A día de hoy más de 750.000 somalíes se encuentran en riesgo de muerte debido a la grave crisis. Ante esta situación, Oxfam ha señalado que el aumento de enfrentamientos y la restricción en la llegada de ayuda pueden provocar un mayor número de desplazamientos de población.

En este sentido, la organización insta a todas las partes del conflicto a respetar el derecho internacional humanitario y esforzarse por minimizar las bajas civiles, al tiempo que solicita que el flujo de ayuda humanitaria no se vea afectado en las áreas más afectadas por la sequía y el conflicto.

 "Estamos muy preocupados y preocupadas, ya que los nuevos enfrentamientos pueden tener un serio impacto en las comunidades que luchan por sobrevivir a la hambruna. La principal prioridad en este momento es asegurar la ayuda rápidamente. Pero una escalada de violencia podría dificultar el suministro de alimentos, agua y otros tipo de asistencia indispensable para salvar vidas ", ha manifestado Fran Equiza, director regional de Oxfam.

Los enfrentamientos y el endurecimiento de la seguridad a lo largo de la frontera entre Kenia y Somalia también pueden obstaculizar la llegada de refugiados desde Somalia hasta el campo de Dadaab, en Kenia, a donde cada día llegan cientos de personas en busca de ayuda y cuyo derecho de asilo debe ser respetado.  

Oxfam también ha alertado sobre la reciente inseguridad en Kenia, que ha obligado a la organización a reducir parte de su trabajo. Al mismo tiempo ha asegurado que la población necesita protección y que el mejor camino para lograrlo es conseguir  una región segura a través de una solución pacífica y duradera en el país vecino.

La situación en Somalia es cada vez más alarmante. Se espera que la hambruna se siga extendiendo el  próximo mes, incluyendo enalgunas de las regiones que se enfrentan ahora a nuevos conflictos. Más de 1,5 millones de somalíes - uno de cada seis de la población total- se han visto obligados a abandonar sus hogares debido al conflicto y la sequía, y cada vez más podrían quedarse sin hogar.

Según Equiza, "la gente está huyendo del más inimaginable de los sufrimientos y llega a los campos desesperada por encontrar  comida, agua y refugio. Kenia tiene legítimas preocupaciones de seguridad ya que ha recibido a un gran número de refugiados y refugiadas, pero debe continuar asegurando su protección".

La tasa de malnutrición infantil en Somalia, de las peores del mundo

La tasa de malnutrición infantil en Somalia se encuentra entre las peores del mundo. La próxima estación de lluvias amenaza con brotes de enfermedades entre las comunidades afectadas por la desnutrición. Con el aumento en la respuesta humanitaria en los últimos tres meses se ha conseguido llevar ayuda a muchas partes del país. Oxfam asiste con agua potable y saneamiento a más de 700.000 personas. Sin embargo, la inseguridad y otras restricciones han provocado que muchas otras personas aún no estén recibiendo los servicios necesarios.

En el pasado, la acción militar en territorio somalí ha tenido un impacto negativo sobre la población civil y ha reducido el acceso de ayuda por parte de las agencias humanitarias. Oxfam hace un llamamiento a todas las partes implicadas para que trabajen en la búsqueda de un nuevo enfoque que haga frente a esta crisis y solicita a la comunidad internacional que ponga todo de su parte para buscar una solución pacífica al conflicto.

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