Un año después de que la COVID-19 fuese declarada como pandemia, la Alianza "People's Vaccine" alerta de que los países en desarrollo sufren una escasez crítica de oxígeno y suministros médicos para hacer frente a la COVID-19. A pesar de ello, la mayoría aún no han podido administrar ni una sola dosis de la vacuna, mientras que los países ricos han vacunado a su población a un ritmo de una persona por segundo durante el último mes.