Unidos contra el coronavirus

Nur Jahan* with her daughter Ismat* in her tent, Rohingya refugee camp, Cox's Bazar, Bangladesh

Nur* con su hija Ismat* dentro de su tienda en Cox's Bazar (Bangladesh). Casi un millón de rohinyá en el campamento para personas refugiadas más grande del mundo se enfrentan a una amenaza añadida a medida que se confirman los primeros casos de COVID-19. Foto: Fabeha Monir/Oxfam (*No son sus nombres reales)

El coronavirus nos amenaza a todas y todos. Cada día que pasa, todas las familias, todas las comunidades y todos los países, dondequiera que estemos, nos vemos afectados personalmente por esta pandemia. Aunque nos esforzamos por proteger a nuestros seres queridos y familias, el virus sigue propagándose a nivel mundial y empieza a llegar a las personas más vulnerables y pobres de todo el mundo.

Para las comunidades que viven en condiciones de hacinamiento, sin acceso a agua potable, saneamiento o atención médica, el impacto del virus está siendo devastador. Si no lo controlamos, el virus podría acabar con millones de vidas más y sumir a la mitad de la población del planeta en la pobreza.

Ningún individuo, comunidad o país pueden gestionar esta crisis por sí solos. Para acabar con la pandemia y evitar el daño a miles de millones de vidas, debemos trabajar conjuntamente. Tenemos que actuar en todos los países y para todas las personas. Ayudar a unas y no a otras no es una opción, y estaríamos agravando el riesgo para todas y todos.
 

Nadie está seguro hasta que todo el mundo lo esté.